sábado, 6 de diciembre de 2014

LA FRECUENCIA CARDÍACA EN EL DEPORTE


Actualmente la sociedad en general está cada vez más concienciada de los beneficios que obtenemos cuando salimos a hacer deporte. Por día que pasa vemos a más gente caminando, en bicicleta o corriendo. Esto es algo muy positivo pero deberíamos tener en cuenta un aspecto importante, la frecuencia cardíaca.

La frecuencia cardíaca es el número de latidos o contracciones por minuto que realiza nuestro corazón. Además nos sirve para medir la intensidad  del ejercicio, puesto que nos indica el pulso que tenemos mientras hacemos deporte.

En los ejercicios dinámicos (resistencia), la frecuencia cardíaca aumenta a medida que lo hace la intensidad del ejercicio. La frecuencia cardíaca se incrementa desde los valores de reposo entre 70 y 80 latidos por minuto hasta la frecuencia cardíaca máxima de aproximadamente 190 a 205 latidos por minuto.

Este incremento de la frecuencia cardíaca depende de:
  1. El tipo de ejercicio.
  2. El nivel de fitness.
  3. La edad.
  4. El género.
Cuando realizamos los ejercicios prolongados, con una misma tasa de trabajo, la frecuencia cardíaca aumenta constantemente poco a poco. Este fenómeno se denomina drift cardiovascular y es causado por una menor capacidad de regresar la sangre al corazón conforme van pasando los minutos.

A través de la frecuencia cardíaca ya sea antes, durante o inmediatamente después del ejercicio, se puede estimar el costo metabólico de la actividad.

¿Cómo podemos mejorar nuestra resistencia?

Para mejorar nuestra resistencia es muy importante medir el ritmo cardíaco del ejercicio para calcular la intensidad del entrenamiento.

En primer lugar debemos obtener un valor estimado de la frecuencia cardíaca máxima, para ello tenemos que restar nuestra edad a 220. Por ejemplo para alguien de 20 años, el ritmo cardíaco máximo pronosticado es 200 latidos por minuto (220-20= 200).

Los individuos logran una mejora en el entrenamiento de fondo cuando sus ritmos cardíacos están entre un 55/65 para el 90% del ritmo cardíaco máximo entre 20 a 60 minutos de duración.

De esta manera obtendremos el ritmo cardíaco meta, que corresponde a un ritmo cardíaco aumentado que produce cambios positivos.

Utiliza el 55% como el valor más bajo si estás fuera de forma y el 65% como el valor más bajo si estás en forma y eres activo. Para calcular el ritmo cardíaco meta debemos multiplicar nuestra frecuencia cardíaca máxima por ya sea 0.55 o 0.65 (dependiendo del nivel) y después por 0.90.

Ejemplo: Para una persona de 20 años activa y en forma, su frecuencia cardíaca máxima sería 220-20=200 pulsaciones por minuto. Para calcular su ritmo cardíaco meta, seria: 200 x 0.65 = 130 pulsaciones. Luego lo haríamos 200 x 0.90 = 180 pulsaciones.

Estos dos ritmos cardíacos representarán los límites más altos y más bajos de la intensidad del ejercicio ideal. Por lo tanto, esta persona debería trabajar la resistencia entre 130 y 180 pulsaciones por minuto para mejorar. La duración sería entre 20 y 60 minutos.

Este intervalo se puede disminuir si deseamos especificar la intensidad del ejercicio, dependiendo de los objetivos específicos de la sesión y nuestro nivel de forma.

¿Cómo podemos medir nuestra frecuencia cardíaca mientras hacemos deporte?

Mide el ritmo cardíaco usando un monitor de ritmo cardíaco o un reloj de ritmo cardíaco, más conocidos como pulsómetros. Existen muchas marcas, modelos y con diferentes precios y características. Hay mucha gente que sabe que existen y de su utilidad pero no lo utilizan porque piensan que “les frenan” en sus progresos, por ejemplo.

Personalmente como entrenador personal recomiendo que lo utilicen aquellas personas que salen habitualmente a hacer deportes como por ejemplo correr o salir en bicicleta, ya que de esta manera nos controlamos las pulsaciones, no pondremos en riesgo nuestra salud y además nos ayudará a mejorar nuestro rendimiento.

Por último os dejo una frase que dijo el entrenador del triatleta  Javier Gómez Noya: "El control del pulso ha convertido a Gómez Noya en el mejor triatleta del mundo."




SERGIO BREA – ENTRENADOR PERSONAL.

Puedes seguirme en Twitter: @sergio_brea02

lunes, 1 de diciembre de 2014

LA IMPORTANCIA DE LA FLEXIBILIDAD


LA IMPORTANCIA DE LA FLEXIBILIDAD


A menudo realizamos actividad física y nos "olvidamos" de un componente del fitness tan importante como la flexibilidad. Esto se debe a que es quizás el área menos estudiada y más incomprendida del fitness.


La flexibilidad consiste en el movimiento de una articulación según su rango de movimiento (ROM).


Cuando nacemos poseemos niveles elevados de flexibilidad que a medida que transcurren los años vamos perdiendo si no la trabajamos regularmente. Desarrollando la flexibilidad obtendríamos beneficios tanto a nivel de salud como en el rendimiento. Tener una buena flexibilidad es importante para el funcionamiento de las articulaciones y para prevenir lesiones durante el ejercicio.


Técnicas de estiramiento:

  1. Estiramiento estático: Consiste en estirar el músculo lentamente y de forma gradual manteniendo el estiramiento por 10 a 30 segundos. La clave está en notar cierta molestia pero sin llegar a sentir dolor. Es la técnica más recomendable.
  2. Estiramiento balístico: Implica acción muscular dinámica donde los músculos se estiran de repente en un movimiento vigoroso. El problema es que los estiramientos rápidos pueden conllevar a una lesión. Debido a esto no es muy recomendable.
  3. Estiramiento pasivo: Un compañero ayuda a mover las articulaciones a través de sus grados de movimiento. Se logra pasivamente un ROM mayor, pero también hay un mayor riesgo de lesión. Debería ser usada solamente por gente experimentada.
  4. Facilitación Neuromuscular Propioceptiva (FNP): La FNP puede mejorar la fuerza y flexibilidad muscular. La técnica más popular es el método de estiramiento contracción-relajación. Contraer el músculo primero puede provocar a éste relajarse más para que se estire de forma más eficaz. La técnica es controversial.

A veces surgen confusiones porque no tenemos claro el momento adecuado para estirar. ¿Cuándo debemos estirar? ¿Es recomendable antes o después del ejercicio?

Algunos estudios sugieren que el estiramiento antes del ejercicio puede disminuir el rendimiento en los movimientos de potencia máxima y al ejercer fuerza. Esto puede conllevar a una lesión. El estiramiento estimula los OTG (Órganos Tendinosos de Golgi), su función principal es evitar que el músculo se desgarre, relajando al que se ha contraído y contrayendo al que está relajado.

Deberíamos estirar después del calentamiento porque al haber realizado previamente ejercicios dinámicos de baja intensidad como por ejemplo el trote suave, los músculos estarán a mayor temperatura y disminuiremos el riesgo de lesión. Por otra parte deberíamos evitar trabajar la flexibilidad después de un entrenamiento intenso, ya que los músculos estarán muy contraídos y si los estiramos demasiado de manera intensa provocaremos una lesión.

Es importante saber que podemos estirar al finalizar la sesión pero siempre como vuelta a la calma (de descarga) y baja intensidad. De esta manera podemos realizar 2 series de 20 segundos de baja intensidad.

Otra opción es trabajar la flexibilidad en una sesión específica. Por ejemplo, una vez finalizado el calentamiento podemos realizar los distintos tipos de estiramientos en tres series. La primera serie será de 50 segundos pero muy poca intensidad; la segunda serie de 40 segundos a mediana intensidad; y la tercera serie de 30 segundos a un poco más de intensidad. Para realizar los estiramientos es necesario no incumplir los principios de la flexibilidad, es decir, realizarlo de manera progresiva y sin llegar al dolor para evitar lesiones.

Como conclusión a estas preguntas que nos planteamos anteriormente podemos decir que deberíamos estirar mayormente al finalizar el calentamiento o como vuelta a la calma de baja intensidad.






PRINCIPIOS PARA MEJORAR LA FLEXIBILIDAD:
  1. Haz ejercicios de estiramiento estáticamente. Estira y mantén la posición po15 segundos, descansa 30 segundos y repite. No realizar rebotes porque aumenta el riesgo de lesión.
  2. Deberíamos senti estiramient suav en  lugar  d dolor Important la relajación.
  3. Practica estiramientos de forma regular desarrolla la flexibilidagradualmente con el tiempo (tarda varios meses).
  4. Durante el calentamiento, haz ejercicios suaves como trote fácil antes de los estiramientos pre-ejercicios. 
  5. Realiza  todolos ejerciciode flexibilidad a ambos ladodel cuerpo.
  6. Evita la competición durante los estiramientos, existen grandes diferencias individuales en la flexibilidad. 

Teniendo en cuenta los beneficios, las técnicas adecuadas y los principios de la flexibilidad expuestos previamente, tenemos que considerar una mayor importancia a la flexibilidad dentro del mundo del fitness.


Finalmente, me gustaría destacar esta frase maravillosa de Albert Einstein aplicándola a este tema para promover y fomentar la importancia de la flexibilidad: "Dar ejemplo no es la mejor manera de influir en los demás, es la única manera."


Sergio Brea Saucedo - Entrenador Personal                Sígueme en Twitter: @sergio_brea02

domingo, 30 de noviembre de 2014

BIENVENIDOS

BIENVENIDOS

Hola a tod@s, me llamo Sergio Brea y he creado este blog para poder compartir, intercambiar opiniones y aprender con ustedes sobre publicaciones relacionadas con el deporte. Me gustaría darles la bienvenida y espero que este blog sea de vuestro agrado. ¡¡Saludos!!


ACERCA DE MI

SERGIO BREA

Diplomado en Educación Física.

Entrenador Personal (EQF Level 4). Certificado Internacional (EHFA, EREPS).